¡Hola Chicas! como les prometí aqui les traigo el Fic Especial - One Shot, por el cumple de Rob. *-*
Ojala les guste =)
-Debo decirles que es rating "M", osea LEMON, así que por si las dudas, ya estan advertidas. *-*
-(no se olviden de hacer click al video, para que si desean, puedan ir escuchando la canción mientras leen)
Muchos Besos y comenten para saber si les gusto. ( Comenten como "Anonimo, o con la opcion "Nombre/URL" porque las demas opciones NO funcionan. culpa de blogger ¬__¬ )
Fic - One Shot Especial Robsten
"Happy Birthday Honey"
(Rob's birthday)
ROB - POV
(Toronto, Canadá – Mayo 2011)
Abrí mis ojos pausadamente, como acostumbrándolos a la oscuridad absoluta. Todo se veía negro a mí alrededor, no podía disipar ninguna silueta conocida, ni siquiera sabía en donde empezaba o terminaba la habitación. La luz de la luna debía de estar asombrosa allá afuera, reflejando cada rincón de la ciudad, mas en donde estaba yo, su resplandor no llegaba a su propósito… Pestañé varias veces, y seguí adentrándome a la Suite, unas manos suaves y pequeñas me atraparon los ojos por la espalda, estaba seguro de quien era, quise contenerlas, pero en un segundo habían desparecido, sólo sentí una brisa fría indicándome que ahí, detrás mío, había estado mi dulce tormento en persona.
De pronto… unas luces, como reflectores de Teatro, enfocaron en el centro de la habitación una forma piramidal grande…
Di unos pasos más, hasta entender lo que mis ojos veían… ¿era un pastel?
— 10, 9 (…), 4, 3, 2… 1…. — giré sobre mis talones sorprendido para identificar la voz o para saber al menos de donde provenía. Si no me equivoco, aquí no teníamos un micrófono y menos un megáfono... pero… ¿cómo era posible ese sonido amplificador?
— ¡Feliz Cumpleaños Honey! —– gritó Kristen llamando mi atención hacia el lugar donde reflejaba las luces de neón. Y lo que vi, me dejó totalmente idiota: Kris saliendo de la torta gigante con una gran sonrisa. Sin detenerse un segundo corrió a abrazarme y yo seguía volando… apoyé mi cabeza en la piel de su cuello, y me impregné del delicioso olor de su cabello… era una mezcla de chocolate y miel…
Ella era real.
Sólo que… algo no encajaba aquí, puesto que hace segundos la tuve a mi lado tapándome los ojos, y ahora, como por arte de magia ¿salía de una torta? ¿Qué…? ¿Pero qué pasa…?
Atrajo mi rostro a sus labios, de inmediato sentí un sabor dulce, y sin más remedio, me sumergí en su deliciosa esencia. Cuando me dispuse a besarla, me vi sentado ya en el sofá y sin Kristen en mis brazos… ¿dónde estaba? Como respondiendo a mi interrogante, sus manos aparecieron por mis muslos, acariciándolos suavemente y dirigiéndolas hacia la pretina de mi pantalón, metió la mano derecha por debajo de mi polera, tocando mi estómago con delicadeza hasta empezar a rasguñarme la piel. Jalé la sábana de la cama con fuerza, escuchaba ya unos leves gruñidos provocándome excitación, la sangre galopaba por mis venas, sus lamidas eran cada vez más intensas, más fuertes… mi boca ya no reprimió ningún gemido, quería besarla, tocarla… pero…
La sábana se deslizó al lado opuesto, como si una fuerza tácita lo hiciera… ¿Qué… qué pasa? Las cogí con fuerza, pero la respuesta no demoraba en llegar. Mi amor ya no estaba, había desaparecido sin decir una palabra, sólo el olor a chocolate reinaba en la habitación haciéndome recordar a ella…
La sábana seguía moviéndose… unas lamidas cortas e interminables en mis pies me hicieron abrir más los ojos… ¿pero qué?
— ¡Bear! — el aludido ladró.
"¿Bear? ¿Qué tiene que hacer Bear en mi regalo de cumpleaños?"
…el olor a chocolate se hizo más intenso.
— ¡Bear ven para acá! —
"Mmmm… Esa es la voz de Kris... Ella es real."
Guauuu, Guauuu…
Y ¡zas! La sábana voló. El aire barrió mi piel desnuda. Estiré mi mano para atrapar la sábana o tirar un manazo a quién me la había quitado, pero no encontré nada.
Sólo una risa, una risa como sonido de cascabeles angelicales retumbó en la habitación…
Pero… ¿Qué pasaba…?
.
. — Lindo trasero, señor Pattinson. — dijo Kristen entre risas pegándome un sobresalto.
Ella sí era real.
— ¿ah?... Pe… pero, ¿Qué...? — grité sentándome en mi sitio totalmente desnudo y buscando por reflejo algo con que taparme. Los estragos de lo vivido anteriormente me tenían mareado.
— Oh… ¿no recuerdas nada? — me preguntó Kris tapándose disimuladamente la boca para seguir riéndose de mi desnudez y mi aturdimiento.
— ¡No te rías! No es gracioso.